LAS ESCUELAS INFANTILES COMO ESPACIO EDUCATIVO

Autor: José Carlos Otero López

Las escuelas infantiles de golf son un espacio de formación, enmarcado en el paradigma cualitativo, subjetivo, interpretativo, con lo cual lo que para unos ámbitos puede ser válido, para otros  no serlo.

Es importante que cada escuela aplica la Técnica de DAFO para adaptarla a sus posibilidades.

Esta modalidad deportiva, además de ser una actividad placentera, constituye un autentico desafío por su gran valor pedagógico, capaz de favorecer la adquisición de un amplio abanico de habilidades básicas predeportivas.

Las posibilidades que el golf nos ofrece en el ámbito de la enseñanza son múltiples y variados, porque a través de su práctica, además de desarrollar el factor lúdico de los alumnos, también puede facilitar el desarrollo de otros aspectos fundamentales:

1.- Desarrollo fisiológico, orgánico y muscular, porque contribuye a mejorar la coordinación, el equilibrio, la locomoción, resistencia aeróbica y anaeróbica.

2.- Desarrollo sociológico, aceptando las reglas de este deporte, su protocolo y normativa y favoreciendo la relación social con los compañeros/as de partida ya que   los jugadores avanzan juntos entre golpe y golpe con un tiempo que permite y    favorece la comunicación entre ambos.

3.- Desarrollo psicológico, asumiendo las limitaciones que nos imponen las reglas del golf y aprendiendo a gestionar las emociones y las tensiones que en cada momento   requiere esta práctica deportiva. Las competencias educativas adquiridas con la práctica de esta modalidad deportiva  pueden ser: gestión de emociones encaminadas a un equilibrio emocional;  elección de opciones para llegar a una toma   de decisiones en cada golpe, teniendo en cuenta elementos naturales que    intervienen como el viento, los árboles, los lagos, etc. O elementos artificiales como bunkers, caminos, fueras de límites, etc.

4.- Desarrollo intelectual porque nos obliga a conocer un reglamento complejo, con unas reglas de cortesía que es imprescindible conocer y memorizar.

La práctica de esta modalidad deportiva en el marco de las escuelas infantiles debemos  atenderla desde un espacio TRIDIMENSIONAL, con 3 pilares fundamentales:

• Desarrollo del factor lúdico
• Espacio educativo para la adquisición de valores, normas, actitudes y favorecedor de la maduración y del desarrollo integral del niño/a: físico, psíquico, social e intelectual.
• Adquisición de habilidades y competencias básicas sobre la técnica del golf

Al ser una actividad educativa, debe contar con un proyecto que recoja la declaración de intenciones de la escuela:

• Que? (Identidad del proyecto)
• Por qué (Razones, justificación)
• Para qué? (Objetivos)
• Para quiénes (Destinatarios)
• Cómo? (Metodología)
• Dondé? (Espacios)
• Quienes? (Agentes)
• Cuándo? (Temporalidad)
• Con qué (Medios)
• Qué tal? (Valoración)

Deberíamos centrarnos en la respuesta a la pregunta ¿CÓMO?, es decir, la metodología de trabajo que vamos a utilizar ya que una hora de clase a los niños/as en la cancha de prácticas acaba aburriéndoles y abandonando el golf, por no desarrollar precisamente el factor lúdico ni la socialización.

Deberíamos plantearnos sesiones de 2/3 horas, con la siguiente estructura de clase:

FASE DE ANIMACION: Trabajo en macrogrupo con juegos lúdicos predeportivos aplicables al golf. Aproximadamente 30 minutos.

FASE PRINCIPAL: Trabajo en microgrupos con técnica de golf, con rotaciones por cancha, putting green, bunker, aproach, etc.

FASE DE VUELTA A LA CALMA: Juegos de desarrollo sensorial aplicables al golf, con una duración aproximada de 30 minutos.

Con este planteamiento, las sesiones de las escuelas infantiles deberán de durar entre 2 y 3 horas.

Aunque debemos tener en cuenta horarios flexibles, también es necesario, mantener el nivel de socialización, evitando clases con grupos muy reducidos de niños/as.

También es importante contemplar actividades complementarias que favorezcan el aprendizaje y la motivación: Sesiones en campos de golf próximos, rutas de senderismo con práctica de golf con elementos de la naturaleza, campus de golf, etc.

Otro elemento fundamental son las ligas de equipos que generen en la escuela la sensación de GRUPO, DE EQUIPO.

Para estas iniciativas es necesario contar con voluntarios que colaboren con los profesionales y con alumnos/as en prácticas procedentes de las Escuelas de Tiempo Libre (monitores), TAFAC, Facultades, etc.

 

PROGRAMA GOLF EN LOS COLEGIOS

El Programa ‘Golf en los Colegios’ trata de inculcar en la población escolar los valores intrínsecos de este deporte –humildad, capacidad de sacrificio, espíritu de superación,…– que asimismo se pueden aplicar en otros muchos ámbitos de la vida y muy especialmente en la educación de los más jóvenes.

Otra iniciativa que debe ser impulsada es la firma de CONVENIOS DE COLABORACIÓN CON ENTIDADES PÚBLICAS Y PRIVADAS (Universidad, TAFAC, etc.) para convertir las escuelas en centros de prácticas para alumnos/as que puedan complementar su formación curriculare o extracurricular.

Dentro de este apartado se puede intentar introducir el golf como ACTIVIDAD EXTRAESCOLAR, donde el profesional vaya a los centros para jornadas de bautismo o de iniciación al golf, potenciando luego visitas guiadas a los campos de golf.

Con estas iniciativas se pretende potenciar la práctica del golf en los centros de enseñanza como un recurso didáctico favorecedor de la formación integral del alumnado y al mismo tiempo contribuir al desarrollo del factor lúdico, teniendo como escenario espacios naturales.

 

GRAN DEMANDA

Introducir el golf como modalidad deportiva en el PLAN XOGADE de la Secretaría Xeral para o Deporte.

Escrito de todos los clubes y de la Federación Gallega demandando la participación en el PLAN XOGADE.